El mejor colchón para dormir profundamente no es fácil de encontrar; no obstante, podemos pasar por los detalles más importantes para tener presente a la hora de buscarlo, y así encontrar el mejor lugar para descansar nuestro cuerpo diariamente.
En el momento que deseamos cambiar nuestro viejo colchón por uno nuevo, podemos encontrarnos con un exceso de información en la web, sin contar con la cantidad de variedades de colchones que existen hoy en el mercado.
Sobre la información por diferentes páginas encontramos consejos acerca del tamaño del colchón, sus capas y la firmeza del mismo, hasta el tipo de espuma o resortes que incluye, la relación de los mismo con las posturas que podemos usar a la hora de descansar y más detalles que son importantes a la hora de considerar nuestro futuro colchón; sin embargo, podríamos tener una guía para reconocer el colchón ideal para dormir plácidamente.
Un descanso reparador es el indicador de nuestro ritmo de trabajo durante el día. Una noche en la que logremos dormir ocho o las horas que necesitemos más que nuestro cuerpo pueda descansar por entero será la base perfecta para trabajar y completar todas las tareas que debamos realizar el día siguiente.
Mientras que pasar una noche en la que nuestro cuerpo no se logra distender completamente, y le provocamos más tensión que descanso puede ser la razón por la cual nuestro día termine siendo una pesadilla.
Un día de trabajo complicado, en el que olvidar algún compromiso importante o estar con menos disponibilidad para atender y responder a lo que debemos hacer puede llevarnos a tener muchos más problemas de los que necesitamos.
Así pues, nuestro descanso debe ser una prioridad, de tal manera el lugar de nuestro descanso debe ser cuidado y estimado con detalle. Para cuidar la salud de nuestro cuerpo y nuestra mente, dormir profundamente será tan vital como mantener una alimentación equilibrada.
La importancia de nuestra relación con nuestro colchón
Nuestro colchón es nuestra base, nuestro sitio de descanso y relajación. Va ser el lugar donde pasemos un tercio como mínimo de nuestro tiempo diario. Para eso, debemos asegurarnos de que sea un lugar cómodo para cada uno de nosotros y que nuestro colchón tenga todas las características que se ajusten a nuestras preferencias personales.
Además, descansar es una acción vital para nuestro cuerpo, ya sabemos que dormir debidamente es necesario para que nuestro cerebro trabaje en procesos de nuestra memoria y aprendizaje. Por lo cual, el lugar debe ser el indicado para garantizar nuestro descanso diario.
Tener en nuestras manos la información indicada acerca de lo que requiere un colchón de buena calidad para nuestro descanso nos permitirá elegir con seguridad nuestro colchón ideal.
Agreguemos que de un colchón perfecto para nuestro descanso depende que despertemos relajados y tranquilos para emprender nuestro día o que encaremos un día largo con mayor tensión y dolores en distintas partes de nuestro cuerpo.
El primer indicador: conoce cómo es tu forma de dormir
Si bien existen claves fundamentales para elegir el mejor colchón para nuestro descanso, el mejor colchón para nosotros depende nuestra forma de dormir. Así que nuestro primer paso a la hora de buscar y comprar un nuevo colchón para mejorar la calidad de nuestro descanso debemos saber:
- Nuestra postura a la hora de dormir: Aun cuando a lo largo de la noche podemos pasar de una postura a otra, es común que tengamos una preferencia por una postura al quedarnos dormidos. Así que ten presente cuál es esa postura.
- Conocer nuestra estatura: Aunque es un número específico y creeríamos que no es relevante, en realidad, para elegir el tamaño indicado de nuestro colchón lo debemos tener presente. Es importante que todo nuestro cuerpo pueda apoyarse debidamente en el colchón.
- Conocer nuestro peso: Hay una relación entre nuestro peso y la firmeza del colchón. Es importante saber que las diferentes materialidades del colchón también están armadas con un soporte para un peso determinado.
Tener un colchón que no está construido para nuestro puede generar un desgaste más rápido, o el colchón puede empezar a deformarse, lo cual podrá ser incómodo para nuestro cuerpo causando así alguna dolencia en nuestra espalda o cuello.
- ¿Sueles moverte mucho a la hora de dormir? Esta es otra respuesta que debes tener en cuenta, ya que un colchón demasiado duro podría ser incómodo si te mueves mucho. De igual manera, si no sueles moverte demasiado, puede que un colchón demasiado blando sea incómodo.
- Duermes frecuentemente con compañía o duermes solo: Esto es importante ya que influye en el tamaño y en la firmeza del colchón, tanto por todos los detalles anteriores como el peso y tamaño de las personas que comparten el colchón, como el hecho del movimiento a la hora de dormir.
Ciertos materiales permiten que se transmita más fácilmente el movimiento por el colchón, debido a esto se puede incomodar alguna de las personas que están en el colchón si son de sueño más ligero.
Una vez que tengas claras las respuestas a estas preguntas, podemos pasar a los detalles sobre el colchón en sí para encontrar el colchón que se ajuste según sus propiedades a tu forma de dormir.
Hablemos sobre os colchones para nuestro descanso
Si bien sabemos que existen diferentes tipos de colchones, ya sea según su tamaño o grosor, debemos hablar también de su firmeza, densidad y propiedades que aportan los diferentes materiales que lo componen. Ya que según su variedad podrán tener una mejor condición para nuestro descanso.
- Tipos de colchones según su materialidad: Podemos clasificar en general a los colchones que son de espuma, los que son de muelles o de látex. Estos tres son los materiales que más se usan en la actualidad para hacer colchones.
Cada uno de estos materiales puede dividirles también en distintos tipos de espuma, como la memory foam o viscoelástica, que es una de las más recomendadas hoy en día. Por otro lado, los muelles o resortes también se dividen en diferentes tipos.
Todas las diferencias serán indicadores que pueden favorecer mejor una u otra postura a la hora de dormir, o incluso, influir en tu calidad de sueño si padeces de algún dolor de espalda.
- El nivel de firmeza: A la hora de la verdad, el nivel de firmeza es uno de los aspectos más importantes a la hora de elegir un colchón. Lo más recomendado es una firmeza media que te permita moverte sin problema, y es la más indicada para dormir boca abajo o de lado.
En caso de dormir boca arriba, se recomienda una firmeza alta; no obstante, una media no vendría mal y puede ajustarse mejor a nuestro cuerpo.
- El grosor del colchón: este tema se menciona poco porque se da por sentado que un buen colchón con densidad alta tiene un grosor de veinte centímetros o unos pocos centímetros menos, aunque no menos de quince. Sin embargo, no está de más tener esto presente para elegir un colchón que cuente con un verdadero soporte para nuestro cuerpo.
Una vez analizamos estos criterios, podremos elegir nuestro colchón ideal. Que el tamaño del colchón sea el indicado para nuestro peso y estatura, que su firmeza sea la que nos garantice un descanso y no pierda su forma tras pocos meses de uso.
En conclusión
Para encontrar nuestro colchón idea tendremos que asegurarnos primero de conocer nuestros hábitos de descanso y más específicamente nuestra forma de dormir. Con esto y los datos exactos sobre nuestro peso y estatura, tendremos los datos principales para buscar nuestro colchón.
Una vez tengamos esto, podemos analizar los diferentes tipos de colchones según su materialidad, es decir, sobre los componentes del colchón. Analizar qué tipo de material se ajusta mejor a nuestras formas de dormir plácidamente.
Luego, podremos también incluir las almohadas que necesitamos para nuestra postura, y sin duda, podremos tener el mejor colchón para dormir profundamente.