Cuando hablamos de colchones de espuma tenemos referencias bastante específicas de qué buscar para encontrar un colchón ideal. Podemos pensar en su densidad y firmeza como parámetros básicos para establecer su calidad, de igual manera, pensar en su tamaño que se acomode a nuestras necesidades y espacio de nuestro hogar.
Pero, otro aspecto que puede ser fundamental a la hora de elegir nuestro colchón es de qué está hecho nuestro futuro colchón, y dentro de esta opción tenemos una amplia lista de opciones, y dichas opciones pueden variar de acuerdo nuestros gustos y las posturas que preferimos para descansar.
Afortunadamente, esto nos permite buscar con libertad el colchón que se ajuste a nuestras preferencias, ya que se han dado varios avances sobre los materiales que usamos para elaborar un colchón, como el cuidado de los mismos.
El conjunto de estas variantes nos permitirá elegir con más tranquilidad y gusto nuestro colchón ideal; no obstante, para realizar la elección del colchón idea debemos tener claro cuáles son los materiales que constituyen el colchón.
Ahora bien, dentro de los diferentes materiales de los colchones encontramos los colchones de espuma. Pero, existen diferentes tipos de colchones de espuma, de igual manera que tenemos diferentes tipos de colchones con resortes.
Esta gran variedad se nos presenta como un privilegio en nuestra búsqueda del mejor colchón para descansar, pero también puede traer una gran cantidad de preguntas al respecto. Es por eso, que consideramos importante que detallemos los diferentes tipos de colchones de espuma.
Si bien, los parámetros para evaluar la calidad parten de la densidad del colchón, aprender de los tipos de espuma que usan en colchones para poder elegir el colchón que se acomode de manera más adecuada a nuestra forma de descanso.
La importancia de la densidad
Hablar de la densidad de un colchón es fundamental, pues es nuestro parámetro base de la calidad del mismo. Nos indica su durabilidad, su firmeza y su capacidad de soporte en relación al peso.
Ahora bien, hablar de densidad nos refiere a la espuma más convencional a la hora de elaborar colchones, la espuma poliuretano.
Con la cual empezamos a calcular el nivel de la densidad de la espuma de la siguiente manera:
Para empezar se toma la cantidad de material reunido en un bloque de un metro cúbico, es decir un cubo de 1 x 1 x1, y el número que se toma como referencia es su peso. Entre más pese un cubo de dimensiones descritas, más densidad tiene dicha espuma.
Una vez sabido esto, se elige determinada espuma, con su densidad, para elaborar el colchón. Y dicha espuma que indica la densidad del colchón, es la espuma principal del colchón.
Recordemos que los colchones pueden estar elaborados de una sola espuma, pero cuentan con más capas de la misma u otro tipo de espuma, más la tela que lo recubre. Estos otros aspectos aportan a la materialidad de colchón, pero su calidad como aspecto central debe ser pensado a partir de la densidad del mismo.
Los principales tipos de espuma
Para iniciar a hablar de los tipos de colchones de espuma, entremos en detalle sobre las distintas clases de espuma usados en el mercado para producir colchones. Cada una con propiedades determinadas que nos permitirá entender en detalle cuáles son las ventajas de cada tipo de colchón.
- Espuma HR o High Resilience: Esto significa alta resiliencia, que refiere a una alta durabilidad y resistencia. Los colchones que usan esta espuma están elaborados a partir de un material llamado isocianato. Tiene una gran flexibilidad, amortiguación y resistencia, tres propiedades fundamentales para un buen colchón. Suelen considerarse colchones que duran un poco más que los que usan otro tipo de espuma más común, tal como la espuma de poliuretano.
- Espuma de poliuretano: Este tipo de espuma es el más conocido y usado en la elaboración de colchones. Su elaboración parte del uso de un plástico poroso, combinado con unas burbujas que poseen diferentes niveles de densidad. Los colchones de espuma de poliuretano de mayor densidad aportan una mayor firmeza que aquellas de menor densidad. Un colchón más firme y duro puede ser de mucha ayuda para determinados dolores de espalda, mientras que un colchón de densidad intermedia puede ser mucho más adaptable.
- Espuma Hiper Soft y Soft: esto hace referencia a un tipo de colchón de espuma mucho más suave y adaptable, también denominado espuma super suave en español. Es preferido por personas que prefiere un colchón más suave y adaptable a su cuerpo, que no les gusta un colchón demasiado duro. Se puede comparar este tipo de espuma con la espuma de resiliencia alta o la espuma viscoelástica. Si bien, cada una tiene sus propiedades, las tres tienden a ser adaptables para cada persona y su cuerpo. Si bien la espuma hiper soft es mucho más suave que la soft, ambos tipos de espuma son perdurables sobre todo si el colchón que recurra a estas espumas, use otra como la de poliuretano, lo que le brinda mayor soporte.
- Espuma Viscoelástica: Este tipo de espuma se ha vuelto bastante popular en el mercado, usado para la elaboración de colchones y almohadas inteligentes ha logrado ganar una buena reputación en la industria. Esta espuma es también conocida como memory foam, es decir, espuma de memoria. La razón por la cual tiene este nombre es que esta espuma se adapta perfectamente al cuerpo de su usuario, lo cual hace que no genere ningún tipo de deformaciones con el tiempo, sino que se adapte siempre al cuerpo del durmiente. Gracias a esto y a su alta densidad, brinda un apoyo relajante y un soporte fuerte para todo nuestro cuerpo, siendo muy útil para personas que sufren de dolencias corporales varias.
- Espuma Ergoconfort: Este tipo de espuma se asemeja a la espuma viscoelástica o memory foam. Puesto que busca adaptarse al cuerpo del durmiente. Suele brindar un buen soporte. También se recomienda porque posee un buen sistema de circulación de aire, gracias a su materialidad. Esto quiere decir que no se acumula el calor y permite el tránsito de aire durante la noche, con los movimientos del usuario.
- Látex: la espuma elaborada con látex ha ganado popularidad debido a su durabilidad y porque se adapta sencillamente al cuerpo, además de tener propiedades hipoalergénicas; no obstante, es importante elegir colchones con este tipo de espuma con cuidado debido a que existen diferentes tipos de látex.
- Espuma viscogel: Los colchones de espuma viscogel tienen la propiedad de tener una alta transpirabilidad, lo cual evita que se acumule mucha temperatura y humedad en el colchón, lo cual hace que sea un colchón de alta durabilidad. Debido a que es una mezcla entre la espuma viscoelástica y gel tiene las mismas capacidades de los colchones de espuma viscoelástica, solo debemos agregar su capacidad transpirable gracias al gel que se suma.
Ventajas de elegir un colchón de espuma
Existen varias razones por las cuales un colchón de espuma es preferible para nuestro hogar; sobre todo si queremos hablar de su versatilidad y capacidad de adaptarse a nuestro cuerpo y a su vez brindar un soporte indicado para proteger nuestro sistema óseo.
Un colchón de espuma de poliuretano de por sí brinda una adaptabilidad adecuada y un soporte firme según su densidad, y en cuestiones económicas es una de las opciones más accesibles. Lo cual nos garantiza un colchón de buena calidad, durabilidad y de gran soporte.
Otro aspecto a favor de los colchones de espuma es su transpirabilidad y los tratamientos anti ácaros que pueden usarse. Esto nos brinda un colchón hipoalergénico, que no acumulará humedad u calor y nos permitirá descansar tranquilamente.
En conclusión
A la hora de elegir nuestro tipo de colchón de espuma debemos entrar en detalle sobre los diferentes tipos de espuma que se encuentran en el mercado, que bien es uno de los materiales que más se usan para elaborar colchones.
Incluso podemos considerar el tipo de espuma usado en diferentes colchones de resortes que podemos estar interesados. Determinado tipo de espuma en su colchón aportará una clase específica de propiedades que podrán crear según su gusto el colchón ideal para su descanso.